Elige tu propia aventura (y hazte cargo)
Por Fausto J. Alfonso
Bajo el concepto de “museo de artes escénicas”, la directora Daniela Funes se animó a trasladar la obra del chileno Ramón Griffero S. (que además suma textos de otras/os) a un hipotético formato ideal. La idea implícita de simultaneidad que se desprende del escrito encontró en el multiespacio Casa de la Cultura y la Memoria de Godoy Cruz el hábitat ideal en términos materiales y una carga simbólica adicional que benefició particularmente a algunas de las “piezas” de esta peculiar “colección”. Así, Tus deseos en fragmentos concretó cinco funciones “a salas llenas” y va por una más, fechada para el 18 de mayo a las 20.30, en lo que será su despedida.
La propuesta ha dejado tela para cortar, como debates a retomar. En conjunto, la experiencia es por demás interesante, aunque en su afán por cruzar tantas aristas, hay muchas cosas que para el espectador se pueden perder en el camino o quizás ni cruzarse con ellas. El disfrute absoluto, también, puede que dependa de imponderables como el clima, el sonido ambiente (interno y externo), la iluminación (interna y externa) y una acústica de resultados aleatorios (tanto en los espacios abiertos como cerrados).
Porque claro, hablamos de una decena de mini obras en sendos salones y patios, que se repiten a modo de loop ante un flujo de público que se renueva constantemente y para el que tampoco hay restricciones de comportamiento (lo que puede derivar en otros imponderables). El planteo laberíntico y las múltiples opciones son un desafío para el espectador, pero también son su pasaje a lo azaroso, con resultados también múltiples y siempre inciertos.
Estas características, que se aúnan en los conceptos de interactiva, inmersiva e itinerante, hacen de la puesta un reto que el público y la crítica deben asumir de entrada, a sabiendas de que la experiencia será mucho más intransferible que lo que ya de por sí es la vivencia de una obra de teatro convencional.
Para decirlo en términos gastronómicos, en Tus deseos en fragmentos todos los ingredientes están sobre la mesa, pero cada cual los combina como quiere. Solo de uno depende quedar satisfecho, con sabor a poco o indigestarse. Pero como todos están frente a una “primera vez”, todos corren el mismo riesgo inicial. El mérito de la directora, sin dudas, está en haber servido la mesa del modo más esmerado posible. Y ese servicio supone (fundamentalmente) la elección de cada espacio y la dirección actoral.
En Tus deseos… se puede ver, caminar, comer, beber, escribir, leer, fotografiar, filmar, whatsappear o simplemente oír. Esto último encerrado en un habitáculo que encapsula la voz experimentada de Silvia del Castillo. También se puede comentar por lo bajo, quedarse parado o sentarse y atravesar por delante de los artistas o de los otros asistentes.
Yendo a lo interpretativo, el fuerte de la puesta pasa por el trabajo físico (ver entrevista a la directora)*, que en ocasiones termina compitiendo con los elaborados textos, en algunos casos engulléndolos. Salvo que uno los entienda como disociados o paralelos, atentos a estas palabras propias de Griffero: “Estos textos están escritos para múltiples instalaciones que se arman y desvanecen, produciendo una sensación de laberinto mental donde ideas, sueños, deseos se intertextuan con un mundo de imágenes plásticas y conceptuales, o puntos de realidad que van entregando una percepción paralela a aquella de la acción verbal descrita”.
No es el caso –esto de la competencia cuerpo/palabra- de la escena que comparten Eugenia Videla y Claudia Racconto o la que protagoniza Fabiana Fara, dos de las más interesantes, aunque también las más ligadas a una óptica realista, si se quiere. En otra línea, resultan atractivas las escenas protagonizadas por Gabriela Céspedes, por su entrega actoral y el interesante juego visual del vestuario; el carácter poético-musical planteado en la situación que comparten Natalia Polo y Emiliano Politino; la sutil evocación de los días oscuros de la Argentina en la danza intimista de Guadalupe Richard; o el planteo de lucha colectiva sobre el deseo a no tener miedos que protagonizan Victoria Bernal, Ileana Bosio Lamená, Julia Videla Bordín, Agustina Gonzalez Mallea y Nicol Escorihuela (aquí sí un poco perjudicado por el sonido ambiente). Todo esto dicho en función de la “versión” vista por quien suscribe y solo por quien suscribe.
Los deseos del título se presentan en su más variada gama y tienen que ver con situaciones irresueltas, idealizadas, disfrutadas o padecidas. Personales, de pareja, de tríos, de grupos, en un planteo que alude a la diversidad de emociones y elecciones, y que no le esquiva al roce físico intenso, allí donde la pasión diluye un cuerpo en otro. El deseo hacia adelante y hacia atrás. El deseo como proyección, pero también como ligado estrechamente a la memoria, lo que reafirma como apropiado al lugar elegido.
El espectador puede que se identifique con la palabra, con la acción o con ambas cosas. O que sea testigo de un deseo propio irrealizado. Tus deseos… es como un juego de búsqueda. Más que de tesoros, de sentimientos. Aunque, tome el camino que tome, el asistente atento seguramente encontrará sus propias piezas, valiosas y emotivas, para atesorar. Animarse es el primer paso.
Ficha:
Tus deseos en fragmentos. Idea, producción y dirección general: Daniela Funes. Dramaturgia original: Ramón Griffero S. Textos añadidos: Imposible, de Oliver Kozlov; Yo no quiero ser recuerdo, de Elvira Sastre; Historia de un amor, de Cristina Peri Rossi; Hubiéramos y La eternidad es larga, de Daniela Funes. Intérpretes: Raúl Ricardo Rojas, Liza Rule Larrea, Guadalupe Richard, Ana Liceaga, Franco Carletti, Sebastián Becette, Gabriela Céspedes, Lucia Gómez Diez, Francesca Scordo Lara, Fabiana Fara, Lucas La Rosa, Abril Capitani, Agustina Gonzalez Mallea, Nicol Escorihuela, Victoria Bernal, Ileana Bosio Lamená, Julia Videla Bordín, Claudia Racconto, Eugenia Videla, Natalia Polo y Emiliano Politino. Actriz de voz: Silvia del Castillo. Coach vocal: Gabriela Catulo. Música original: Franco Cicarilli. Difusión y redes sociales: @biomecanica.teatral.arg. Casa de la Cultura y la Memoria (Lavalle 88, Godoy Cruz). Función despedida: 18 de mayo, a las 20.30.
*Entrevista a Daniela Funes: https://el-pacto-de-fausto.webnode.com.ar/news/multiverso-a-la-carta/